El día 12 de abril visitamos la Biblioteca del Estado con el alumnado de los grupos 1º A y B del Proyecto Travesía. Era una visita especial por la cantidad de objetivos que nos proponíamos con ella. En primer lugar, nos interesaba que nuestro alumnado conociera la Biblioteca como un espacio vivo, con posibilidades para el ocio, un punto de encuentro para hacer trabajos, deberes, ver películas e incluso para quedar con nuestros amigos. Para ello contamos con Mai, la guía que nos condujo por todas las dependencias y servicios de la Biblioteca. Así pues, nuestros chicos y chicas pudieron echar a un vistazo a los fondos de música, cine, cómic, literatura, etc. que allí se encuentran. Algunos aprovecharon para llevarse en préstamo algunos libros y otros se enteraron de lo que tienen que hacer para convertirse en usuarios.
La segunda parte de la mañana fue muy distinta: la Biblioteca se convirtió en un aula de trabajo. Durante estas semanas hemos ido tratando con l@s chic@s las características del texto narrativo. Hemos leído y analizado algunos textos, hemos reflexionado sobre los elementos de la narración, hemos hecho mapas conceptuales para organizar lo aprendido... Había llegado la hora de convertirnos en narradores.
Cuando emprendemos una actividad creativa, como es escribir un relato, es mejor no estar sujetos a un horario estricto y estar en un ambiente inspirador y agradable. Y esa es la razón por la que organizamos esta actividad. La sala de literatura juvenil fue el espacio donde nuestr@s alumn@s desarrollaron las historias que habíamos esbozado en clase convirtiéndose, de este modo, en narradores.
El día 12 de abril visitamos la Biblioteca del Estado con el alumnado de los grupos 1º A y B del Proyecto Travesía. Era una visita especial por la cantidad de objetivos que nos proponíamos con ella. En primer lugar, nos interesaba que nuestro alumnado conociera la Biblioteca como un espacio vivo, con posibilidades para el ocio, un punto de encuentro para hacer trabajos, deberes, ver películas e incluso para quedar con nuestros amigos. Para ello contamos con Mai, la guía que nos condujo por todas las dependencias y servicios de la Biblioteca. Así pues, nuestros chicos y chicas pudieron echar a un vistazo a los fondos de música, cine, cómic, literatura, etc. que allí se encuentran. Algunos aprovecharon para llevarse en préstamo algunos libros y otros se enteraron de lo que tienen que hacer para convertirse en usuarios.
La segunda parte de la mañana fue muy distinta: la Biblioteca se convirtió en un aula de trabajo. Durante estas semanas hemos ido tratando con l@s chic@s las características del texto narrativo. Hemos leído y analizado algunos textos, hemos reflexionado sobre los elementos de la narración, hemos hecho mapas conceptuales para organizar lo aprendido... Había llegado la hora de convertirnos en narradores.
Cuando emprendemos una actividad creativa, como es escribir un relato, es mejor no estar sujetos a un horario estricto y estar en un ambiente inspirador y agradable. Y esa es la razón por la que organizamos esta actividad. La sala de literatura juvenil fue el espacio donde nuestr@s alumn@s desarrollaron las historias que habíamos esbozado en clase convirtiéndose, de este modo, en narradores.
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